El Distrito 38 de Detroit, conocido como Brick Mansions se ha convertido en una zona de guerra de bandas tan peligrosa que el Ayuntamiento ha decidido convertirla en un guetto con barricadas para que nadie pueda salir de allí, manteniendo así el orden en la ciudad. Pero cuando Tremaine Alexander, el jefe de Brick Mansions, se hace con un poderoso explosivo que se ha activado automáticamente, las autoridades envían a un policía infiltrado para que desactive la bomba antes de que se lleve por delante media ciudad. Para ello contará con la ayuda de un convicto cuya novia ha sido secuestrada por Tremaine.