El secreto: Atrévete a soñar

Reseña

Podrías llamar a esta chuchería de bajo conflicto «Introducción a la Manifestación», dado que su propósito parece ser intrigar a los espectadores que son nuevos en el concepto de «El Secreto». El Secreto se trata de creer que el universo es una especie de genio: Creer que puedes tener o lograr algo, y lo harás.

O, como el seguidor del Secreto, Bray, explica a los hijos de Miranda: Tus pensamientos son como un imán, usando una fuerza invisible para atraer lo que piensas hacia ti.

Para los que no están familiarizados, puede sonar como un montón de tonterías de la nueva era – o, como la abuela de los niños le dice al profesor Bray de Vanderbilt, «¿Estás seguro de que no eres de California?».

Sin embargo, la forma en que El Secreto: Atrévete a soñar lo explica, es más sobre su actitud. Piensa en positivo. Cree en ti mismo. Y, como el título indica, está bien ser un soñador.

Es buena la película

Al igual que el libro de instrucciones original de Byrne, el dinero y los bienes materiales son las recompensas de usar El Secreto. Es menos notorio aquí pero, en última instancia, incluso el grandioso deseo de un niño se hace realidad, lo que puede hacer que los padres se sientan un poco incómodos.

Y es difícil pasar por alto un gigantesco agujero de sentido común en la historia. Bray no tenía por qué ser tan misterioso, y vas a tener que suspender tu incredulidad para disfrutar realmente de esta película. Es difícil probar que una teoría de la vida funciona en el contexto de una historia ficticia, así que el mensaje es un poco débil.

Pero, de nuevo, el punto parece ser conseguir que el público vaya a investigar y probablemente compre el manual. Aunque el contenido es familiar, la mayoría de los niños y adolescentes no están interesados en el romance de la mediana edad. ¿En resumidas cuentas?.

El Secreto: Atrévete a soñar es una película agradable pero no terriblemente entretenida que no hace daño – ni hace tanto bien como pretende.